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Foto del escritorYasel Lopez

Datos sobre los cambios en la política de asilo en la frontera con México

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció cambios significativos en la política de asilo en la frontera con México.

Estos cambios otorgan a los agentes federales más poder discrecional para negar solicitudes de asilo a aquellos extranjeros que representen una amenaza para la seguridad pública y nacional de Estados Unidos.


La nueva regla permitirá a los funcionarios de asilo considerar estas prohibiciones desde el inicio del proceso de evaluación de solicitudes de asilo, lo que acelerará el proceso de determinar la elegibilidad para el asilo.
El DHS ha enfatizado que la ley federal prohíbe el asilo y la suspensión de la expulsión para aquellos que representan un riesgo para la seguridad nacional o pública, como aquellos con condenas por delitos graves o que han participado en la persecución de otros.

Además, se busca acelerar las deportaciones de aquellos que no cumplen con los requisitos para recibir asilo.

Estas medidas han sido implementadas como parte de una estrategia del gobierno de Joe Biden para abordar la crisis en la frontera sur, que ha visto un aumento en detenciones, deportaciones y cruces ilegales en los últimos años.

La falta de capacidad del gobierno federal para gestionar esta crisis ha sido evidente, con millones de detenciones en la frontera y un aumento en las solicitudes de asilo por parte de extranjeros que huyen de sus países por diversas razones.

La ley y los reglamentos vigentes establecen que, si un individuo solicita asilo y expresa un miedo creíble, su caso será referido a un juez de inmigración, quien tomará la decisión sobre su futuro en el país.

La Corte de Inmigración (EOIR) tiene una gran cantidad de casos acumulados, con un tiempo promedio de resolución de entre 3 y 4 años.


Sin embargo, existe la preocupación de que estas modificaciones puedan resultar en deportaciones injustas y negación de casos válidos para solicitar asilo en Estados Unidos.
Abogados consultados expresaron que los cambios eran esperados debido a la presión para detener la crisis de casos de asilo en la frontera.

La nueva norma de asilo también incluye la aplicación de la regla de Elusión de Vías Legales (CLP) por parte del DHS, con el objetivo de incentivar el uso de procesos ordenados y aplicar consecuencias más rápidas a quienes no tienen una base legal para permanecer en Estados Unidos.


En casos en los que se determine que existe una causa probable de miedo creíble, el caso será remitido a un agente de asilo del servicio de inmigración para su evaluación.
Si un agente determina que una persona no cumple con los requisitos para recibir asilo, se procederá a su deportación expedita.

La Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS) emitió una guía revisada para los funcionarios de asilo

Con el fin de evaluar la posibilidad de reubicar a los solicitantes de asilo en otras partes del país donde puedan estar seguros de la persecución.


La medida para rechazar rápidamente el asilo de algunos inmigrantes será impugnada en los tribunales de justicia.

La administración Biden se encuentra en una posición complicada, ya que cualquier acción en materia de inmigración será cuestionada, pero al mismo tiempo se enfrenta a la presión pública para abordar la crisis fronteriza.

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